Este fue nuestro pack lowcost de presentación

¿Qué es una acción LowCost?

El pasado miércoles 9 de Abril hicimos la acción de presentación del colectivo en los estudios y agencias de Sevilla. El motivo de esta acción, a la que llamamos #aquíhaymiga, no era otro que el de darnos a conocer entre los profesionales del sector de nuestra ciudad, haciéndolo de una manera diferente y creativa, y desmarcándonos de la manera tradicional, más fría y distante.

Nuestras premisas al pensar en cómo deberíamos presentarnos entre los compañeros de profesión que se ganan el pan como nosotros, eran la de usar elementos sencillos, que pudiésemos reutilizar o reciclar, y que no requiriese de mucha inversión para poder llevarla a cabo.

Muchas han sido las felicitaciones desde entonces por la originalidad y el éxito obtenido, debido principalmente a la sencillez y a lo económico de la acción. Para nosotros una acción lowcost no es aquella que sale barata, sino la que sale rentable. Esa rentabilidad la vemos en que el coste total de la acción ha sido aproximadamente 110€ y la repercusión que ha tenido ha sido excelente.

Hemos multiplicado el número de seguidores en facebook y twitter, tuvimos mucho seguimiento durante la acción por parte de las agencias y estudios de Sevilla, que se llenaron los estómagos, sonrieron, guardaron nuestra tarjeta y visitaron nuestra web para ver nuestros trabajos ¿Qué más podíamos pedir para una acción de presentación?

El desglose de los costes de la acción es el siguiente:

bolsas de papel 3€
adhesivos redondos 20€
sello con claim 24€
bollos de pan 10€
plantillas para el pan 0€
desplazamientos en vehículos 45€ (150Km x 0,3€)
tarjetas corporativas 5€

TOTAL: 107€.

Hay que tener en cuenta que los bollos han sido hechos al efecto con una medida y un tipo de pan concreto. Los que disfrutasteis de su sabor, seguro que os daríais cuenta. Dentro del precio está incluido el asesoramiento, la mano de obra y el suplicio que es tener a tres personas pululando con cámaras y teléfonos móviles y preguntando en la hora punta de una panadería. En nuestra opinión ha sido baratísimo y los bollos estaban exquisitos.

En fin, como veis no pensamos llevarnos ningún secreto a la tumba, porque nos queremos alejar de esa parte oscura de la publicidad de rivalidades entre agencias, robos de clientes y medallas en la solapa, y nos apetece hacer las cosas desde la sencillez y el trabajo en equipo.
En cuanto a los pocos bollos que sobraron, al ser de una elaboración tradicional, se quedaron duros como piedras al día siguiente. Así que un sacrificado miembro del equipo se jugó las muelas para rentabilizar al máximo la inversión. El reciclaje es maravilloso ¿verdad Kokko?.